Al iniciar el semestre me sentía un poco nerviosa, ya que era la primera vez que tomaría clases de una manera diferente a lo que en realidad estoy acostumbrada, no fue algo del otro mundo, pero después de tomar algunas clases me sentí algo más relajada. Cuando leí mi tira de materias y vi la de comunicación oral y escrita, mi cabeza imagino que solo retomaría lo mismo que había visto en clase de español, pero en realidad todo fue muy distinto. Desde el primer día la maestra explico la metodología que utilizaría para trabajar en su materia, a como iba el paso de los días sentía que las tareas como el mapa mental y la infografía las realizaría de la misma manera en la que lo hacia en mis clases de secundaria o preparatoria, pero no fue así.

Mis perspectivas de esa clase cambiaron por completo, la manera de trabajar por competencias era algo nuevo para mí. Tuve que adaptarme a nuevas cosas. Una de ellas era programar mi tiempo en las actividades a realizar, ya que no eran las únicas tareas que tenía que realizar durante el semestre, aprendí mucho a ser líder, a tener paciencia y hacer más responsable.

Ser líder conlleva a saber trabajar en equipo, desarrollar nuevas habilidades, ser creativo y organizado. Se muy bien que llevar a cabo las actividades de esta materia fue un reto para mí, pero aun así fue algo que honestamente lo aprendí muy bien.